Ni flowers

Hace unos días, limpiando la cocina, vi que todavía teníamos una botella de vino blanco bastante caro que le regalaron a mi padre hace casi 2 años. ¡Qué desaprovechamiento! pensé. La podríamos usar algún día cenando, aunque claro, si ningún día hacemos ninguna cena así especial, también es bastante tontería bebérselo porque sí. Casi mejor que viendo el tiempo que lleva ahí, nos esperemos a nochebuena o similares.

Entonces pensé en lo bien que quedaría si invitara a unas amigas a cenar a casa (cuando la tenga, claro jaja), a no ser que a ellas no les gustara el vino blanco. Pero el gran dilema vino cuando me puse a pensar en qué podría hacerles de cena porque 2 de ellas son vegetarianas, pero una come huevos y la otra no. Así que empecemos: no podría ser una cena en plan tapas porque no podría haber tortilla de patata, ni la mayonesa o allioli de las patatas bravas, ni jamón o embutidos... tampoco carne ni pescado... y además, no son las típicas vegetarianas de todo verduritas, así que descartamos también las ensaladas.

Una opción sería hacer varios platos y lo que no comen unas se lo comen otras, pero joer, para pasarme toda la tarde pringando en la cocina prefiero que nos vayamos a un restaurante y que lo hagan otros jaja. La opción de la pizza a domicilio está muy vista, y además no pienso malgastar un vino caro para eso jaja. ¿Entonces qué nos queda? ¿arroz a la cubana? ¿macarrones con tomate solamente? jo, que complicado...

Así que nada chicas, está claro, la solución es la cena de sobaquillo... vosotras traed lo que os apetezca comer que yo ya pongo el vino y la casa jajaja.