Ni flowers

El viernes pasado celebré por fin mi cumpleaños (sólo 3 semanas después) aprovechando que venían Rocío y Mónica a pasar el finde a Valencia. Se supone que íbamos a cenar en un nuevo bar de montaditos que había cerca de casa de Silvia, que lo inauguraban esa noche y teníamos invitaciones, pero cuando llegué me tenían preparada una fiesta sorpresa con globos, serpentinas y hasta piñata jajaja ohhhhhh graaaaaciaaaaaassss! O soy muy inocente o que bien mentís porque no me lo esperaba jajajaja. Habían montaditos, pizzas, rollitos de primavera, pinchos de tortilla, empanada… que buenísimo todo, aunque nos sobró más de la mitad.

Esa misma noche conocí al futuro padre de mis hijos, lo que pasa que él aún no lo sabe jajaja y además, nos quedamos con las ganas de la presentación formal ¿eh Ana? jaja joer… O_o

Sobre los regalos tengo que decir que de aquí voy a salir mugiendo! Pero me gustaron todos, creo que es el año que más me han gustado. Me regalaron unas sábanas de vaca con almohadón a juego, unas chanclas de vaca, un juego de plato, tazón y taza con una vaca (esto estuve a punto de comprármelo hace tiempo pero al final no lo hice, menos mal), una vaca de peluche, una cajita de madera que tiene una vaca, un bonsái de tangue (esto será para que se alimente la vaca, digo yo) y un ¿pisapapeles? en forma de pirámide con mi horóscopo. Los más avispados os daréis cuenta de que me gustan las vacas, aunque voy a tener que ir eligiendo otro animal para el año que viene… jaja.

Otro día, lo mismo cuento lo del sábado y el domingo porque ha sido el finde de los camareros majos.